Estas historias solo se pueden ocurrir en los Estados Unidos. Miles Scott es un niño de cinco años que sufre leucemia. Ayer cumplió su sueño. Ser Batman por un día. En su caso Batkid.
Su padre se puso en contacto con la Make-A-Wish Foundation para que hicieran realidad su deseo. Y lo consiguieron. San Francisco se transformó ayer por unas horas en una Gotham amenazada por el Acertijo y el Pingüino. Pero no había de qué preocuparse, Miles ya se había enfundado su traje de Batkid.
El espectáculo dio comienzo a las diez de la mañana y contó con la participación de miles de personas que esperaban la llegada del defensor de Gotham con pancartas de bienvenida y apoyo. Para la recreación Miles contó incluso con su propio Batmovil, un lamborghini negro tuneado para la ocasión. Las proezas del pequeño fueron seguidas en directo por los medios de comunicación e incluso contaron con la colaboración de los Giants de San Francisco con el rescate de su mascota de manos de El Guasón.
Por supuesto, la agotadora jornada concluyó con la entrega de las llaves de la ciudad a su salvador ante una multitud. También se distribuyeron diarios especiales y como broche final el mismo Presidente de los Estados Unidos mandó al pequeño un mensaje de vídeo de agradecimiento a través de twitter.
San Francisco cuenta con un nuevo héroe. El pequeño Miles. Un chico duro dispuesto a luchar contra todo.
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